El sistema de frenos ABS es un elemento crucial para llevar a cabo una conducción segura.
No solo en situaciones habituales, como ir al trabajo o recoger a tus hijos del colegio, sino cuando factores externos como el clima o el estado de las carreteras entran en juego.
En este artículo te explicamos todo el funcionamiento de este mecanismo y su importancia. ¡Sigue leyendo!
¿Para qué sirve el sistema de frenos antibloqueo?
El sistema de frenos antibloqueo, también conocido por sus siglas en inglés ABS (Anti-lock Braking System), está diseñado para que el conductor pueda maniobrar sin perder el control del vehículo durante la frenada y así evitar obstáculos.
Es un elemento clave para mantener una conducción segura en cualquier recorrido. Por eso, tener constancia de que el sistema de frenado antibloqueo se encuentra en buen estado en todo momento es muy importante.
Puedes ponerte en contacto con expertos que revisen por completo tu coche, de manera rápida y efectiva, para que compruebes que tu vehículo no necesita ninguna reparación y tengas más tranquilidad cuando te desplazas.
¿Cómo funciona el sistema de frenos de ABS?
Como hemos comentado, la función principal del sistema antibloqueo de frenos es evitar que las ruedas pierdan tracción y terminemos perdiendo el control del vehículo en cualquier maniobra que involucre los frenos.
Para ello, si eres el conductor, solo debes pisar firmemente el pedal de freno y embrague al mismo tiempo. Aunque notes alguna vibración en tus pies, no dejes de presionar en ningún momento, ya que es así cómo funciona el sistema antibloqueo.
Pero, ¿cómo es esto posible?
El sistema de frenos antibloqueo está compuesto por una serie de componentes:
- Sensores en los neumáticos que registran la velocidad de giro de cada una de las ruedas, puesto que, por ejemplo, en las curvas no giran todas a la misma velocidad.
- Un sistema de control general que recoge la información de los sensores e indica cómo deben de funcionar las válvulas de control.
- Dichas válvulas de control regulan la cantidad y presión de líquido de frenos que le pertenece a cada rueda para que frenen más o menos dependiendo de la velocidad de giro.
- Y otros elementos como las pastillas de freno, los frenos de disco, el propio líquido de frenos con sus tuberías correspondientes, las pinzas de freno y la bomba de frenado.
Todos estos componentes articulan el mecanismo de frenos ABS, por lo que si alguno de ellos no se encuentra en buen estado, no funcionará de manera correcta.
¿Qué pasa si no funciona el sistema ABS?
Si el sistema de frenos ABS de tu vehículo no va como debería, o ni siquiera cuenta con uno por ser muy antiguo, es tu responsabilidad calcular cuándo levantar el pie del freno para que no se bloqueen las ruedas y puedas mantener el control.
Sabemos que esto no es una tarea sencilla y, sobre todo, puede resultar muy peligroso. Por lo que siempre te recomendamos que si estás pensando en adquirir un coche te asegures de que cuenta con un sistema de frenos ABS.
Además, te aconsejamos que, para tu propia tranquilidad, realices un mantenimiento periódico. Comprueba que el líquido de frenos está en perfectas condiciones, que no haya burbujas de aire en el circuito, y que todos los componentes estén en buen estado.
Tienes a tu disposición nuestro servicio de taller formado por un equipo de profesionales que te ayudarán con la comprobación del estado de tu vehículo para que la seguridad de ti y de los tuyos esté siempre garantizada.
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